18 enero 2006

¿Bachelet es socialista?



Leo un mail de un periodista que fue a cubrir las elecciones en Chile, y me doy cuenta que no estoy sola con mis pensamientos acerca de la elección de Michelle Bachelet.
Y es que hay toda una necesidad, si se puede entender así, un apuro en agrandar el espectro de lo que los grandes medios llaman facilonamente “la izquierda latinoamericana”.
Ya me había pellizcado cuando escuché hace pocos días a un columnista de CNN sostener que “en Latinoamericana hay dos izquierdas”. “Una, que se lleva más o menos bien con el capital – dijo- de la que forman parte Tabaré, Lagos y Lula”.
“Y la otra –siguió el tipo con su acento neutro- la que no se lleva tan bien con los capitales, que es la de la Chávez, Morales y Kirchner”.
¡Epa!, dije. ¿Y yo donde estoy viviendo?. ¿Kirchner en el mismo paquete que Evo y Chávez?. ¿Y donde están las similitudes?.
El análisis no fue muy profundo, claro. Pero de todas maneras me hizo prestar más atención al discurso que los medios, en general, utilizan sobre este tema.
Y esto quedó claro con la elección de Bachelet. Resulta que ahora el triunfo de Bachelet representa “otro triunfo de la centroizquierda en América Latina”. Y ahí, otra vez, todos a la bolsa. Me pregunto a quien le está siendo funcional este mezclar todo para sacar de esa coctelera quien sabe qué.
Incluso Telesur, que acaba de ampliar su señal a Chile, colabora con la confusión general.
Aclaremos: Bachelet representa a la Concertación por la Democracia -integrada por el Partido Socialista, la Democracia Cristiana, el Partido por la Democracia (PPD) y el Partido Radical Socialdemócrata (PRSD)-, que gobierna Chile desde 1990 (primero con los democráta cristianos Patricio Aylwin y Eduardo Frei, y últimamente con el representante del PS Ricardo Lagos). Nunca, hasta hoy, se había equiparado el gobierno de la Concertación con ninguna izquierda latinoamericana. Tampoco las políticas de sus presidentes, de corte neoliberal y proclives al libre comercio, hicieron algun mérito por parecerlo.
Chile ha sido, sí, el país más pujante de América Latina en estos años. Basta estar allí para palpar el “desarrollo”: grandes shoppings, carreteras que a los argentinos nos parecen casi de ciencia ficción, y celulares ultramodernos. Pero la desigualdad existe: la distribución del ingreso es tan inequitativa como en toda la región, la educación superior es paga e inaccesible para la mayoría, los jubilados reciben sumas bajísimas como en casi todo el sur del continente...
Entonces ¿por qué creer hoy que Bachelet es parte de un viento de cambio en Latinoamérica? (lo mismo estoy empezando a preguntarme de Kirchner, pero esa es otra historia).
Y para terminar: algo que también me parece parte de un análisis simplón y nada comprometido es eso de que “ahora hay una mujer presidenta, se va a acabar el machismo, la discriminación y la violencia familiar”. Llamativamente, Clarín y Página/12 también coinciden en aventurar que “se abre una nueva era”, con esta elección.
Primero, que una mujer no garantiza nada por el sólo hecho de ser mujer. Un hombre tampoco, claro. Quien puede garantizarlo es un ser humano cualquiera, decidido a cambiar el orden de cosas imperante.
Quien puede garantizar un gobierno sensible, cercano a las necesidades de los que más sufren (no digamos de izquierda, que las etiquetas están gastadas), es una persona comprometida y sobre todo convencida, de que quiere seguir ese camino.
Ese camino es, a mi entender, el de Evo, el de Chávez. Dejo aquí aparte el caso de Cuba que levanta tanta polémica ( aunque no tanta para mí, pero es también otro debate).
Michelle Bachelet fue una víctima de la dictadura. Sufrió como tantos miles de sus compatriotas. Pertenece al Partido Socialista, y venció a la derecha más retrógrada representada por Piñera y Lavin. Pero ¿es socialista?.
Habrá que empezar a redefinir conceptos, y a hilar un poco más fino. Porque entonces, ¿cómo traemos hoy al presente la memoria de Salvador Allende...?.
Que su ejemplo y su mirada sean la guía para empezar a pensar...

9 comentarios:

Claudio dijo...

Natalia.. en primer lugar me resulta extraño que me haya llegado un correo con tu link.. leiste mi blog??? si no es asi... hazlo... ccasttle.blogspot.com
En mi ultima columna señalo que Bachelet implica un quiebre, el comienzo de una nueva etapa, ya que hemos reconstruido el Estado que fue desmoronado con las privatizaciones fraudulentas de Pinochet y lo que es peor en su credibilidad... hoy en Chile tenemos un Estado confiable, muchos de los tramites importantes se hacen via electrónica, la devoluciòn de impuestos llega el dìa que te señalan, la provisiòn estatal se hace a travès de un sistema de compras y contrataciones electrónicas pùblicas, donde se exige que el proveedor estè al dìa en impuestos y en el pago de la previsiòn social de sus empleados, se que el ejemplo es burdo y obviamente es màs potente lo que tu dices respecto de la desigualdad del ingreso... pero trabajamos por ello, cada dìa hay mayor acceso a la educaciòn superio... mucho màs que antes... y estamos esperando que con Michelle Bachelet se construya una red de protecciòn social sòlida, es el nuevo "welfare state" chileno que nace... nace de una mujer.. porque serà un parto y nadie mejor que una mujer que sabe cuàn doloroso pero gratificante es dar a luz una hermosa criatura... es cierto Bachelet no representa el socialismo añejo, porque serìa involucionar para nosotros, sino màs bien representa el concepto de "el Mercado està ahì y el Estado tambièn, hagamos que el ùltimo juegue un rol màs importante, controlando, fiscalizando, regulando, protegiendo y acogiendo". Estamos construyendo la verdadera "MADRE" patria, a partir del dolor de nuestra Presidenta, pero tambièn de su empuje, amor por los demàs y espiritu de reconciliaciòn.

Anónimo dijo...

Cualquiera puede ser socialiste... recuerda nomás a Rodríguez Zapatero que viene un partido que se dice incluso Obrero (Como lo oyes: PSOE significa Partido Socialista Obrero Español y no Partido Socialista Onanista Español)

Nat dijo...
Este blog ha sido eliminado por un administrador de blog.
Nat dijo...

Claudio: todo lo que dices es cierto. Yo viví allí dos años y pude disfrutar en persona de esos beneficios y de esa seriedad de los que hablas, que aquí en Argentina ni los soñamos.
El comentario iba más bien orientado a la confusión que se pretende generar (desde ciertos medios-sectores políticos) a partir de los últimos cambios de gobierno en América Latina, y no a una crítica hacia el modelo chileno (al que le critico y le reconozco cosas).
Ahora, no coincido contigo en que "nadie mejor que una mujer sabe". Insisto: sabe el que tiene las cosas más claras, y ese podría haber sido hombre o mujer. Porque si no, también corremos el peligro de que si Bachelet fracasa...habrá fracasado por sus características de mujer.
¿Socialismo añejo? no creo que lo haya. Más bien diría que el socialismo tiene diversos matices. Unos en particular me convencen más que otros, como es normal, pero además llega un momento en que esos matices se vuelven tan irreconciliables que uno llega a la necesidad de dar preguntarse que es el socialismo realmente. A uno de esos momentos de duda obedece lo que escribí.
Acabo de entrar a tu blog, y lo estoy agregando en mi blog roll.
Saludos argentinos

Felipe: gracias por aclarar la sigla :) A veces nombres, etiquetas, calificaciones se vacían tanto de contenido, que hace falta barajar y dar de nuevo ¿o no?
Gracias por pasar por aquí.

Nat dijo...

Nooo... para nada interpreté tu post como un apoyo al socialismo de Bachelet (por otra parte no son tus palabras, así que no tendría por qué).
Buscaba otras miradas sobre este tema,porque de verdad me interesa encontrarlas, y me encontré con ese post. Me pareció interesante intercambiar visiones, sobre todo viendo el resto del contenido de tu blog. Por eso te escribí.
Me alegro que coincidamos en algo, no es fácil encontrarse con ideas en común en estos tiempos. Al menos para mí.
Ah! también estuve por tu blog de poesía, sí. Me gustó mucho.
Saludos

PD: es la segunda vez que escribo esta respuesta. Telefónica y su bendito servicio de llamada en espera me cortaron la conexión. Ya vez que no sos la única...

Periodismo Independiente,Tribuna ciudadana dijo...

Te invito a leer algunos análisis políticos que pueden ilustrar y complementar tu interesante artículo.
Los puedes leer en mi blog
o en www.granvalparaiso.cl.
Saludos
Hernán

Anónimo dijo...

Bueno, en primer lugar, decirte que estoy de acuerdo contigo en muchas de las cosas que comentas en el post. pero prefiero centrarme en el fondo y esencia del mismo. Preguntas si Bachelet es realmente socialista. La primera respuesta acertada sería "pregúntale a ella"; otra podría ser "miremos sus actitudes, estilos, formas e ideas". Pero esta segunda tiene "trampa". El problema es que lo en este tipo de debates ideológicos se cruzan dos variables: lo que ella siente por un lado, y lo que hace por otro. Pero claro, para sustentar la discusión es necesario definir "qué es el socialismo". Evidentemente es un comentario no podemos hacer un repaso de las trayectorias del movimiento social más grande de la historia de la humanidad. Pero para acotar (espacio y tiempo) podemos afirmar y calificar como socialismo el espectro ideólogico que va desde el comunismo más ortodoxo a la socialdemocracia más moderada. Una ideología tan inmensa e inabarcale con cientos de ramificaciones cuyas diferencias pueden estar entre meras coyunturas o matices, o entre grandes formas de ver el mundom, no puede simplificarse aplicándola a una sola persona, ergo forma de actuar y ver el mundo. ¿Bachelet es socilista? Si; ¿Chavez? Si; ¿Evo Morales? Si; ¿Zapatero? Si; ¿Fidel Castro? Si; ¿Sadamm Hussein? Si. Ahora bien, ¿ideológica y formalmente son iguales? Evidentemente no, algunos ni siquiera coinciden en nada. La explicación de esta paradoja la puedes encontrar mirando el desarrollo y evolución del socialismo a lo largo de la historia.

Nat dijo...

Gracias Hernán, estuve por tus blogs. Interesante, pero sobre todo muy lindas fotos de Valparaíso, gratos recuerdos para mí.
¿Verdad que Valparaíso parece estar hecho para ser fotografiado?
Gracias por pasar.

Antonio: y si, tu comentario viene siendo la conclusión de todo esto. Pero el caso es que, me parece, este tipo de preguntas sirven para hilar fino y empezar a ver donde uno está parado, o al menos para comprender mejor ciertos procesos.
Si el socialismo de Bachelet se me presenta como más cercano al de Zapatero, y más lejano al de Evo Morales, eso me sirve para comprender un poco más de que va verdaderamente el proceso de "cambios" en América Latina, por ejemplo.
Un saludo y gracias por leerme.

Anónimo dijo...

Tracción joven / traición de siempre.

Hermano liceísta
que Bachelet suene a
Pinochet.
No confunde tu rebelión joven,
de siempre.

Siguiendo a Liber Arce , Ramona Parra,
Santiago Pampillón y a otros frutos/hijos
de latitudes fértiles.

Recuerdos
Reencuentros
Derechos,
que nunca mueren.

Ejemplo puro , que nos golpean duro
donde mas nos duele ....el futuro,
pero la esperanza es ...fuerte.

Bachelet otra setentista retrógrada
social reformista
silvestre.
¡ No te disfraces más!
de socialista ni de ....mujer
¡nada te queda ya!
de la utopía ni de..oprimida .

Gabriel Velozo vientos de letras y arena